Diálogo entre una madre fastidiosa y una hija muy amargada
Día cualquiera de la eternamente fastidiosa semana:
Hija muy amargada (o sea, yo) se encuentra frente a un pobre espejo tratando de arreglar lo que la genética hizo con su cara, para, así, poder salir a la universidad sin matar del susto a ningún ser vivo. Madre fastidiosa (mi linda mami) entra en la habitación y se sienta.
Madre fastidiosa: tenemos que ir a la embajada (de España). Acuérdate que después de los 18 tienes que ir a decir que quieres seguir teniendo la nacionalidad.
Hija muy amargada (pensando): WTF?
Hija muy amargada (dice): ¡Ay, no, mamá! Esa gente es sumamente odiosa y lo tratan a uno como una mierda, yo no quiero ir para allá en un buen tiempo.
Madre fastidiosa: ¡Pero tienes que ir algún día! ¿O vas a dejar que eso se pierda?
Hija muy amargada: Tranquila que eso no se va a perder. Un día de estos iré.
Madre fastidiosa: ¡Ay, pero es que sería bueno que lo aprovecharas! Hasta podrías irte a hacer un postgrado allá.
Hija muy amargada: Mamá, me quedan todavía cuatro años de placer eterno en la universidad. Además, aquí también se hacen postgrados.
(Nota: aquí una carrera universitaria dura cinco años, que serían diez semestres y yo apenas voy por el tercero)
Madre fastidiosa: Yo sé, pero lo digo es para que le saques provecho a esa nacionalidad. Hasta una beca te pueden dar.
Hija muy amargada: Bueno, no me vendría mal una beca para pagar la universidad que cada semestre se pone más cara.
Madre fastidiosa: Entonces deberías ir a la embajada a preguntar lo de la beca y así aprovechas y averiguas sobre los postgrados...
Hija muy amargada se da por vencida frente al espejo, pues no puede mejorar nada. Se voltea con su cara de "Odio todo" y le dice, tiernamente, a su madre:
"Mamá, no sé qué será de mí en el futuro, tal vez cambie radicalmente de opinión, pero ahora yo no quiero hacer un postgrado ni en España, ni aquí, ni en ningún lado. En este momento estoy segura de que en cuanto salga de la universidad jamás volveré a pisarla. Como te dije, tal vez cambie de idea y termine haciendo 2000 postgrados, pero ahora no me interesa. Y en cuanto a la embajada y la vaina esa, yo iré, algún día, pero te digo que si por mala suerte me quedo sin papel toilet, usaré ese pasaporte en su lugar. Luego iré a la embajada a decir que se me perdió y tendré que soportar que esa gente me trate como un mierda, pero secretamente habré disfrutado la falta del papel toilet."
La madre fastidiosa no dijo más nada.
Días después la hija muy amargada le mostró un link que encontró en el blog de Isa: http://www.scrolllock.nl/passport/ y madre fastidiosa se divirtió.
Dedicado a mi mami, que tiene que soportarme todos los días hasta que me mude o hasta que me pise un tren (hasta ahora es más probable que me pise un tren, pues si me mudo voy a tener que empacar demasiadas inutilidades y papeles).
¡Te quiero, mamá!
Hija muy amargada (o sea, yo) se encuentra frente a un pobre espejo tratando de arreglar lo que la genética hizo con su cara, para, así, poder salir a la universidad sin matar del susto a ningún ser vivo. Madre fastidiosa (mi linda mami) entra en la habitación y se sienta.
Madre fastidiosa: tenemos que ir a la embajada (de España). Acuérdate que después de los 18 tienes que ir a decir que quieres seguir teniendo la nacionalidad.
Hija muy amargada (pensando): WTF?
Hija muy amargada (dice): ¡Ay, no, mamá! Esa gente es sumamente odiosa y lo tratan a uno como una mierda, yo no quiero ir para allá en un buen tiempo.
Madre fastidiosa: ¡Pero tienes que ir algún día! ¿O vas a dejar que eso se pierda?
Hija muy amargada: Tranquila que eso no se va a perder. Un día de estos iré.
Madre fastidiosa: ¡Ay, pero es que sería bueno que lo aprovecharas! Hasta podrías irte a hacer un postgrado allá.
Hija muy amargada: Mamá, me quedan todavía cuatro años de placer eterno en la universidad. Además, aquí también se hacen postgrados.
(Nota: aquí una carrera universitaria dura cinco años, que serían diez semestres y yo apenas voy por el tercero)
Madre fastidiosa: Yo sé, pero lo digo es para que le saques provecho a esa nacionalidad. Hasta una beca te pueden dar.
Hija muy amargada: Bueno, no me vendría mal una beca para pagar la universidad que cada semestre se pone más cara.
Madre fastidiosa: Entonces deberías ir a la embajada a preguntar lo de la beca y así aprovechas y averiguas sobre los postgrados...
Hija muy amargada se da por vencida frente al espejo, pues no puede mejorar nada. Se voltea con su cara de "Odio todo" y le dice, tiernamente, a su madre:
"Mamá, no sé qué será de mí en el futuro, tal vez cambie radicalmente de opinión, pero ahora yo no quiero hacer un postgrado ni en España, ni aquí, ni en ningún lado. En este momento estoy segura de que en cuanto salga de la universidad jamás volveré a pisarla. Como te dije, tal vez cambie de idea y termine haciendo 2000 postgrados, pero ahora no me interesa. Y en cuanto a la embajada y la vaina esa, yo iré, algún día, pero te digo que si por mala suerte me quedo sin papel toilet, usaré ese pasaporte en su lugar. Luego iré a la embajada a decir que se me perdió y tendré que soportar que esa gente me trate como un mierda, pero secretamente habré disfrutado la falta del papel toilet."
La madre fastidiosa no dijo más nada.
Días después la hija muy amargada le mostró un link que encontró en el blog de Isa: http://www.scrolllock.nl/passport/ y madre fastidiosa se divirtió.
Dedicado a mi mami, que tiene que soportarme todos los días hasta que me mude o hasta que me pise un tren (hasta ahora es más probable que me pise un tren, pues si me mudo voy a tener que empacar demasiadas inutilidades y papeles).
¡Te quiero, mamá!
SE ACABÓ
Comentarios
Si tener la nacionalidad española te da ventajas, pues hay que aprovecharlas. :)
Y de paso, me invitas¡ XD
las mamás siempre se preocupan bien muucho, y que bueno porque si no seriamos un desastre jeje :)
aunque a veces si se pasan un poquito.
Bueno, igual espero que vayas cuando más haga falta, con tu último aliento o algo así...
un abrazote! (y de paso le das uno a tu madre) :)
Gaby: tranquila que una parte de mí también la apoya a ella.
Winterchaos: ¡NO! Bueno...técnicamente sí. Al menos yo no lo considero, lo que pasa es que mi padre lo es y por eso tengo las dos nacionalidades, pero yo soy venezolana de nacimiento, cuerpo y alma jajajaja.
Pily: Cuando sea millonaria te invitaré, y puedes traerte al Gordon!
Zeleste: jajaja me imaginé viejita de camino a la embajada y en cuanto me trataran mal les caería a golpes con mi cartera de abuela jajaja. Es cierto, sin las madres seríamos un desastre.
Un besote!
muy bueno!!
Orlando.
Besos!